A lo largo de la historia, existen evidencias de cómo es imposible separar la evolución del ser humano del desarrollo de la tecnología. Desde el origen del fuego, la rueda, pasando por la revolución industrial hasta llegar a las innovaciones que vivimos hoy en día. Si bien tecnología se refiere a la aplicación de la ciencia a la resolución de problemas concretos; está estrechamente relacionada con computadoras, dispositivos que tienen menos de 100 años de creación y que pasaron de ser objetos que permitían descifrar mensajes encriptados durante la Segunda Guerra Mundial, a convertirse, en gran parte gracias a IBM, Microsoft y Apple, en objetos de uso cotidiano. Tiempo después llegó la web o www, que posiblemente haya sido el mayor salto de la historia en la tecnología de la comunicación, permitiendo la transmisión instantánea de datos, documentos, audio e imágenes fijas y en movimiento a través de una url.

Las empresas tecnológicas y los servicios que ofrecen ya no son los mismos. Por ejemplo, hace apenas 15 años para “mandar un mensaje” tenías que llamar a una compañía, decir el mensaje, y ellos lo enviaban a un aparato “beeper”, en donde el receptor lo leía. El negocio de los pagers como beeper desapareció; hoy en día se envían alrededor de 45 millones de mensajes vía WhatsApp por minuto. O Kodak, el negocio de fotografía que fue una de las más poderosas compañías en el mundo, se declaró en bancarrota en 2012 por haber perdido de vista por completo el auge de las tecnologías digitales y querer mantener el rollo con 36 fotografías; hoy se pueden almacenar 8000 fotos en una memoria relativamente pequeña.

Llegamos al 2020, tecnología, sociedad, negocios y pandemia. Las personas estamos adoptando nuevas formas de vida, apoyados por nuevas tecnologías que están constantemente acelerando y cambiando. Existen nuevos negocios en gran parte gracias a un teléfono celular que no sólo es eso, es un reproductor y almacenador multimedia, una herramienta para realizar compras y pagos, creador y transmisor de contenido y geolocalizador.

Existen nuevos mercados de los que todos podemos formar parte, mercados globales de ventas en línea, mercados de economía colaborativa en donde podemos ofrecer nuestros servicios (freelancer), ser taxistas (uber), o incluso rentar nuestra casa (airbnb). La tecnología está cambiando la forma en que hacemos negocios, y el entorno empresarial en una economía altamente digital. De ahí la importancia de adoptar tecnologías que conviertan a nuestro negocio en un negocio digital. Recordemos que cualquier compañía se puede transformar, y aquí dejo algunos tips para poder lograrlo:

  1. Forma pequeños equipos: este tipo de equipos pueden fallar y volver a fallar sin destruir a la empresa, pueden experimentar y probar varias veces hasta llegar a una posible solución o producto innovador y revolucionario.
  2. Ser abiertos: las grandes empresas como Facebook o Google, comparten “sus secretos” con sus empleados, con el compromiso de que la información no saldrá de la empresa. De esta forma garantizan unidad y sobre todo la posibilidad de que surjan nuevas ideas, ya que estas pueden venir de todos lados, desde el senior que lleva 20 años en la empresa, hasta el rookie que está haciendo sus prácticas.
  3. Digital first: recuerda que los nuevos mercados están orientados hacia el negocio digital.
  4. Gente correcta: con un buen entorno y las herramientas necesarias, la gente creativa puede marcar la diferencia.
  5. Pensar en grande: recuerda que el mayor riesgo es no tomar riesgos.